Esta es la receta de uno de los dulces mas tipicos y representativos de Oviedo Los Carbayones.
El Carbayón es un típico pastel ovetense, su nombre viene de un enorme roble al que se le suponen al menos cinco siglos de antiguedad y que es uno de los simbolos más emblematicos de Oviedo, capital del Principado de Asturias.
Tanta es la trascendencia de este simbolo que ha dado lugar al gentilicio oficioso de los ovetenses, llamados también carbayones.
Actualmente nuestro historico árbol ya no existe pero una placa en la calle de Uria, la más importante de la ciudad, recuerda a todos los que por ella pasean que un día estuvo ahí.
Los Carbayones, como pastel nacieron en la confiteria Camilo de Blas, una de las mejores y con mas solera de Oviedo.
La historia de este pastel se remonta a 1924, cuando el pastelero José de Blas lo presentó para que representase a Oviedo en la I Feria de Muestras de Gijón.
El Carbayón es un pastel de almendra y yema con una base de hojaldre y bañado con azúcar. Toda una delicia para el paladar.
Bueno, después de un poco de historia sobre este rico pastel vamos con la receta.
RECETA:
INGREDIENTES:
- 2 láminas de hojaldre
Para el relleno:
- 125 gr. de almendra molida
- 2 huevos y 2 yemas
- 125 gr. de azúcar
- 1/2 copa de vino dulce
- la ralladura de 1 limón
Para el baño de yema:
- 3 yemas
- 5 cucharadas de agua
- 100 gr. de azúcar
Para el glaseado:
- 100 gr. de azúcar glas
- 4 cucharadas de agua
- unas gotas de zumo de limón
Si el hojaldre es congelado lo sacamos un par de horas antes para que vaya descongelando, si es refrigerado lo sacamos de la nevera y lo utilizamos directamente.
Enharinamos la meseta y colocamos encima una de las placas de hojaldre, espolvoreamos otro poco por encima y con el rollo estiramos un poco.
Vamos cortando en rectangulos un poco más grandes que el molde, untamos estos con un poco de mantequilla y cubrimos con el hojaldre.
Vamos forrando todos los moldes con el hojaldre, tiene que quedar todo bien cubierto. Recortamos los bordes. Así hasta que los tengamos todos listos.
Pinchamos un poco todo el fondo para que no suba demasiado.
Precalentamos el horno a 190º
Para el relleno ponemos en un recipiente la almendra, los huevos, las yemas, el azúcar, el vino dulce y la ralladura.
Con ayuda de unas varillas vamos mezclando hasta que quede una pasta homogenea.
Rellenamos los moldes pero no del todo porque suben un poco con la cocción.
Los metemos al horno unos 40 minutos, tienen que quedar dorados. Si veis que pasado este tiempo no lo están suficientemente los ponemos otros cinco minutos solo por arriba.
Mientras se van haciendo preparamos el baño de yema.
Ponemos en un cazo el agua con el azúcar. Lo dejamos hervir 6 minutos revolviendo de vez en cuando con unas varillas. Apartamos del fuego y dejamos un par de minutos que baje el calor.
Mientras tanto batimos las yemas en otro bol y vertemos sobre ellas el almibar poco a poco y revolviendo continuamente.
Volvemos a echarlo otra vez en el cazo y ponemos a fuego suave removiendo sin parar hasta que espese. En unos minutos estará listo.
Apartamos del fuego y con una cuchara vamos cubriendo los pasteles con una buena capa de yema.
Dejamos que enfrien,
Por último preparamos el glaseado.
Ponemos en un cazo el azúcar glas, el agua y el limón, calentamos para disolver bien el azúcar. Separamos del fuego y revolvemos bien hasta que quede blanco y con una consistencia de pasta de dientes. Si fuese necesario echariamos otro poco de azúcar o de agua.
Cuando el baño de yema haya enfriado pintamos los carbayones con la glasa. Yo lo hice con una cuchara pero si os resulta más fácil podeis hacerlo con una brocha. Dejamos que endurezca totalmente.
Yo los deje toda la noche. Están mucho mas ricos bien reposados.
Al día siguiente los sacamos de los moldes metalicos y los ponemos en moldes de papel.
APUNTES:
Es una receta un poco larga porque lleva varios pasos pero el resultado merece la pena.
El hojaldre por supuesto lo compré, todavía no tengo mucha experiencia para su realización. Pero espero no tardar mucho en poneros la receta. Es una de mis asignaturas pendientes.
El hojaldre que se compra también es muy bueno. Yo particularmente prefiero el refrigerado pero eso lo dejo a vuestra elección.
Los moldes originales son como los de las magdalenas pero alargados.
Es mejor hacerlos en unos de acero y luego pasarlos a los de papel.
Si los hacemos en los de papel corremos el riesgo de que se nos abran, por eso si decidimos hacerlos así debemos meterlos en otro molde que los sujete.
El sabor no queda tan fuerte como los autenticos, pero mis incondicionales me dijeron que los daban de paso.
Así que estoy encantada con mis carbayones!!!
Estoy convencida que si probais os van a salir estupendos y repetireis!!!
Hacía tiempo que tenía muchas ganas de hacer estos dulces, pero me parecían un poco complicados. Para nada es cuestión de tiempo y paciencia .
Por supuesto mi marido está encantado ahora que aprendí la receta, son su pastel preferido!!!
Un abrazo muy dulce para todos
Sweet Loli
Para cualquier duda que os surja o si queréis pedirme alguna información, además de en los comentarios también podéis contactarme en mi email dulcessweetloli@gmail.com
Dulces Sweet Loli 